The Kumano Kodo pilgrimage route in the land of the raising sun, and the Way of Saint James where the sun sets, are two pilgrimage routes twinned since 1998, and the only ones recognized as World Heritages by UNESCO. Despite being in opposite sides of the world, the routes don’t have such a different history. No one knows the exact date of their appearance, and both of them had had their time of splendor, a period of decay and, finally, of rebirth at the end of the twentieth century.
Kumano Kodo
The area of Kumano, in Mie prefecture, Japan, had been associated with veneration towards nature from ancient times, as well as with the quest for inner peace and purification through thermal springs. The pilgrimage routes of the Kii mountains of Kumano started to appear during the 10th century, and have lasted until the present day. The pilgrimage combines aspects from Shintoism and Buddhism, the two main religions of Japan. From the 11th century to the 13rd century, the Imperial House of Japan started doing numerous pilgrimages to Kumano, and the way’s infrastructure got better and wider. From the 14th century to the 16th century were mainly the well-known samurais the ones who did the pilgrimage to Kumano. It was only in the 15th century that the pilgrimage reached common people.
The time period comprised from the 17th to the 19th century was the golden age for the Kumano Kodo. Japan experienced a time of peace and of economic growth during this years. More artisans and merchants become interested in Kumano, and the general infrastructure was improved, attracting new pilgrims. From the 19th century the pilgrimage went into decline, and it was not until the 90s that it manages to revive with new pilgrims walking its paths. This number increased with its declaration as a World Heritage in 2004.
The pilgrimage
The Kumano way consists on three different sanctuaries communicated by a route that allows to take different paths and directions. All in all, it is a pilgrimage to a sacred mountains, the Kii mountains, and to its three principal shrines: Hongu Taisha (熊野本宮大社), Hayatama Taisha (熊野速玉大社) and Nachi Taisha (熊野那智大社).
Desde sus orígenes, el Kumano Kodo ha estado fuertemente ligado a la naturaleza, puesto que está marcado por el sintoísmo, la religión animista y nativa de Japón, que venera a los dioses de la naturaleza. El dios de Nachi Taisha es la propia cascada que se sitúa al lado del templo, mientras que el río Kumano es un importante lugar sagrado y parte íntegra del camino. Eso sin hablar de los hermosos cerezos que en primavera podemos encontrar en flor a lo largo del camino, y de la impresionante conífera sagrada de más de 800 años de antigüedad, la más grande de su tipo en Japón, que se alza orgullosa en los jardines del templo Hayatama Taisha.
El Kumano Kodo cuenta con diferentes rutas, principalmente cuatro: la ruta de Nakahechi, la más popular a día de hoy y la utilizada por la familia imperial en el origen de las peregrinaciones, siendo sus suelos empedrados la estampa que más la caracteriza; la ruta Kohechi, que cruza las montañas y cuenta con un desnivel de 1000 metros, considerándose una de las rutas más complicadas y, por ende, la menos transitada; la ruta Ohechi, que transcurre al lado de la costa y que durante el período Edo (siglos XVII-XIX) atrajo a numerosos artistas y escritores japoneses por sus espectaculares paisajes; y la ruta de Iseji, que conecta la ciudad de Ise, al sureste, con los tres santuarios de Kumano.
El Kumano Kodo tiene la peculiaridad de que dentro de sus rutas de peregrinación se incluye el río Kumano, que desde los orígenes del camino constituye una parte íntegra del camino. Los peregrinos viajan en barca desde el santuario Hongu Taisha hasta el de Hayatama Taisha en la desembocadura del río, siendo estos dos de los puntos clave de la peregrinación de Kumano. Esta parte del camino sobre el agua también fue incluida como Patrimonio de la Humanidad, siendo el único camino acuático reconocido como camino de peregrinación por la UNESCO.
Los Oji
Algo particular del Camino a Kumano es la existencia de los llamados templos oji. Son pequeños santuarios de dioses menores, que se sitúan a lo largo del camino a Kumano para proteger y guiar a los peregrinos. En la actualidad son importantes porque sirven de guía para no perderse y saber que se sigue el buen camino, y también para poner el sello en nuestra credencial, de la que os hablaremos más adelante.
Curiosidades del Kumano Kodo
Es curioso observar como cada una de estas dos rutas de peregrinación, el Kumano Kodo y el Camino de Santiago, tiene sus propios ropajes o símbolos que identifican al peregrino como tal. En el Camino de Santiago, tradicionalmente los peregrinos portaban el característico bordón con una calabaza y al acabar la peregrinación volvían llevando la vieira, que sigue siendo muy popular llevarla en la actualidad, y que marcaba que habían terminado su peregrinación. Los peregrinos del Camino de Kumano llevaban el tradicional sombrero Minachi, hecho de madera de ciprés, bambú o paja de arroz y con su característica forma cónica o de punta redondeada. Aún ahora, es común ver a peregrinos con sombreros de este tipo, adornados con escrituras en japonés.
Algo que también llama la atención de los extranjeros que van a realizar el Kumano Kodo, o que visitan Japón en general, es la gran abundancia de máquinas de bebidas, que ofrecen desde bebidas calientes como café, hasta zumos y tés de la mayor variedad. No os extrañe pues, que mientras disfrutáis de la naturaleza en su estado más puro recorriendo los caminos de Kumano, aparezca de repente una máquina de bebidas para romper la estampa momentáneamente. Cabe decir, que en verano especialmente, con las altas temperaturas, es una pequeña molestia óptica que se agradece en gran medida. A su vez, a lo largo del Kumano Kodo, también es habitual encontrarse puestecitos de lugareños que venden sus productos. Que no os sorprenda que no haya nadie para atenderos. Está pensado para que la gente se lleve lo que necesite y deje el pago correspondiente.
Aunque el Camino de Kumano no está pensado para hacerlo en bicicleta, Japón es un país donde nuestras amigas son especialmente populares, y gente de todas las edades las usa como método de transporte habitual, por lo que no os será difícil haceros con una si deseáis hacer una ruta en bicicleta por alguna de sus ciudades.
Peregrinos Duales
Desde el año 2012, la Prefectura de Wakayama y la Xunta de Galicia colaboran para la promoción de ambas rutas de peregrinación. Una de las medidas que han decidido adoptar es el llamado Dual Pilgrim (Peregrino Dual), siendo este un credencial conjunto para ambos peregrinajes que certifica haber recorrido ambos caminos, y que como emblema combina la vieira de Santiago con el cuervo de tres patas, símbolo de Kumano.
Uno de sus lados está dedicado a los sellos del Camino de Santiago, y el otro a los del Camino de Kumano, que se pueden conseguir en los templos principales, en los ojis, y en pequeñas estructuras de madera a lo largo del camino.
El doble credencial se puede registrar tanto en Santiago como en el santuario Hongu Taisha de Japón, tras haber realizado ambas rutas de peregrinación. Solo que si se hace en este último, se tiene acceso a participar en una ceremonia especial, que incluye poder tocar los tambores del templo, y además, recibir un certificado en washi, el papel tradicional japonés, con una caligrafía original escrita de mano del sacerdote principal del santuario.
A los que os guste viajar y disfrutéis de un buen recorrido a través de la naturaleza, con paisajes hermosos y tranquilos, el Kumano Kodo ha sido hecho a vuestra medida. Especialmente, si ya habéis hecho el camino de Santiago o tenéis intención de hacerlo.
A los que tuvierais la oportunidad de disfrutar del Camino a Kumano o tengáis ganas de hacerlo, y aún no hayáis probado suerte con el Camino de Santiago, Tournride os facilita el material necesario para realizar al menos los últimos 200 km en bicicleta (¡si no más!) de este último y conseguir vuestra doble credencial.